Carta a Aquilina Palomino
Hace mucho que no hablamos. Es difícil hacerlo cuando no puedo leerte ni escucharte, pero aun así te las ingenias para enviarme mensajes. Los entiendo más rápido que antes. Ya no soy el mismo que conociste, pero a la vez sí. Sé que guías mis pasos y estás en cada nuevo logro que consigo.