Marlon Aquino: El autor que hizo de la TV una novela

“Prefería las palabras a las imágenes porque podía imaginar lo que no veía”. Así comenzó el vínculo inquebrantable de Marlon Ytalo Aquino Ramírez con la literatura. El pasado 23 de mayo, en el marco del I Encuentro de Letras y Voces, organizado por el Departamento de Humanidades de la sede Comas, el escritor presentó su obra Ficción TV —publicada en 2022— y cautivó a estudiantes y docentes con una charla que fue mucho más que una presentación: fue una invitación a leer con los ojos del corazón.

El propósito de esta videoconferencia fue claro: fortalecer en los estudiantes de la UPN el pensamiento creativo y crítico, desarrollando en ellos la capacidad de leer con profundidad y escribir con rigor. En un contexto donde producir textos expositivos y argumentativos se vuelve clave, dialogar con autores como Marlon Aquino permite entender que la literatura no solo se analiza: se vive.

De la Biblia a Vargas Llosa

La historia de Marlon Aquino no es la de un escritor cualquiera. Desde niño sintió el llamado de las palabras. Su primer libro fue la Biblia —sin saberlo—, y quedó marcado por la profundidad de ese texto. En casa, su papá y su mamá le leían. En la escuela, escuchaba fascinado a los profesores de Literatura e Historia. Fue un profesor quien le prestó De la Tierra a la Luna, que devoró en una semana. Más tarde, lo acompañarían las aventuras de Los viajes de Gulliver.

Casi estudia Ingeniería Electrónica, pero el destino, caprichoso como los mejores personajes de novela, tenía otro plan. No ingresó a la Universidad del Callao por apenas un cuarto de punto. Decepcionado, deambuló sin rumbo hasta que un vendedor ambulante le ofreció un libro: La ciudad y los perros, de Mario Vargas Llosa. Lo leyó. Lloró. Y se descubrió.

Escritor, editor y crítico peruano Marlon Ytalo Aquino Ramirez

El salto al vacío

Decidió estudiar Literatura en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Les confesó a sus padres que quería ser escritor. Ellos, pese a las dudas, le dijeron que lo apoyaban si era responsable. En San Marcos encontró su mundo: profesores que creían en él, amigos que le hablaban en libros, y la certeza de que había elegido el camino correcto.

Comenzó enseñando Lenguaje y Literatura en una academia. Por las noches, escribía cuentos en una máquina de escribir. Hasta que un día se dio el lujo (y el riesgo) de renunciar. Tenía solo 800 soles y el sueño de escribir Las tristezas fugitivas, su primer libro, que fue presentado en el Instituto Cultural Peruano Norteamericano (ICPNA). Con ese impulso, viajó a Estados Unidos, estudió en Northwestern University de Chicago y escribió novelas policiales y románticas. En 2020, su voz literaria ya era sólida.

De la tele en blanco y negro a la ficción en HD

Hay otra pasión que lo marcó: la televisión. A los 12 años, su televisor se malogró y su familia no pudo comprar otro en casi un año. Se entretuvieron con radionovelas, noticias y fútbol, pero él extrañaba a Los Magníficos. Cuando volvió a tener tele a color, lloró de emoción. Ese recuerdo sería semilla de su libro de cuentos Ficción TV, donde entrelaza narrativa, memorias y el poder emocional de la pantalla chica.

“No es la televisión en sí la que embrutece”, dijo durante la presentación. “Es el tipo de contenido. El formato puede ser tan poderoso como un libro”.

Un escritor que enseña con el ejemplo

El encuentro con Marlon Aquino no solo dejó frases memorables. Mostró a los estudiantes que detrás de cada escritor hay una historia de resistencia, de elecciones valientes, de búsquedas inagotables. Su trayectoria es un testimonio vivo de que la pasión por las letras puede transformar destinos, y que escribir, a veces, es la forma más valiente de existir.

Marlon Aquino presentado su primer libro de relatos “Ficciòn TV”